Los legisladores porteños Roberto Quattromano, Daniel Del Sol y Cristina García, presentaron proyecto de la ley para la instalación de “alcoholímetros” y disminuir riesgos en vía pública.
Los legisladores de PRO, Roberto Quattromano, Daniel Del Sol y Cristina García De Aurteneche, presentaron un proyecto de ley para que los locales gastronómicos y bailables cuenten con alcoholímetros de uso gratuito y voluntario por parte del cliente.
“Se trata de una medida preventiva para ayudar a generar conciencia tras haber bebido alcohol. El conductor con dudas sobre su estado podrá hacer la prueba y determinar si está en condiciones de manejar o no. Queremos proteger a los ciudadanos y no tener que seguir lamentando accidentes o fatalidades por la presencia de alcohol en irresponsables al volante”, aseguró Quattromano, autor de la iniciativa.
El proyecto ingresado en la Legislatura porteña propone agregar al Código de Habilitaciones y Verificaciones que “los titulares de las actividades sujetas a habilitación donde se reúnan personas que consuman bebidas alcohólicas serán responsables de proveer los alcoholímetros que requiera la reglamentación”. La cantidad de aparatos por local dependerá de su capacidad.
“Los comerciantes deben comprenderlo como un servicio al cliente, el cual servirá para que los conductores sean más prudentes y conscientes, y así lograr evitar accidentes causados por personas en estado de ebriedad”, afirmó Del Sol.
“El objetivo es contribuir a la seguridad vial fortaleciendo la prevención en materia de tránsito y, además, visibilizar esta problemática ya que muchas veces existe una gran tolerancia social hacia el consumo de alcohol y los problemas que se derivan de ello”, manifestó García De Aurteneche.
La principal causante de muerte en la República Argentina son los accidentes de tránsito y la mitad de ellos se deben a la ingesta de alcohol. Según la Dirección Nacional de Vialidad, conductores alcoholizados tuvieron responsabilidad en nueve de cada diez choques durante fines de semana del 2015. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, los controles del año pasado arrojaron un aumento del 38% de casos positivos con respecto al 2014.
En México se reglamentó que restaurantes y bares deben contar con alcoholímetros a la vista de los clientes. Los aparatos contienen mensajes sobre los peligros de conducir con alcohol en el organismo.