La convocatoria, bajo el lema “¡Basta de injerencia eclesiástica en las políticas públicas!”, fue para exigir que “se deje sin efecto” el convenio celebrado entre el Consejo Social y el Ministerio de Salud de la ciudad de Buenos Aires.
La Regional CABA de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto realizó este jueves por la tarde un pañuelazo frente a la Legislatura porteña para exigir que “se deje sin efecto” el convenio celebrado entre el Consejo Social y el Ministerio de Salud de la ciudad de Buenos Aires, para la implementación de la línea “0800Vida” que será difundida en hospitales públicos y atendida por una red de “organizaciones religiosas y confesionales, explícitamente militantes opositoras al derecho al aborto”.
“Denunciamos enfáticamente el acuerdo firmado entre el Consejo Social de la Ciudad de Buenos Aires, presidido por Cynthia Hotton, y el Ministerio de Salud de la Ciudad con organizaciones religiosas y confesionales, explícitamente militantes opositoras al derecho al aborto que ya es ley desde el 2020”, afirma el petitorio que este jueves por la tarde entregaron a las y los legisladores presentes.
Según explicó a Télam una de las referentes de la Campaña, Elsa Schvartzman, este convenio implica “privatizar políticas públicas” como es el acompañamiento a las mujeres embarazadas que desean seguir con la gestación, al ponerlas “en manos de organizaciones que son conveniadas sin una convocatoria pública previa, transparente y abierta” pero que además tuvieron una activa militancia en contra de la aprobación de la ley IVE.
“Este convenio está basado en la Ley de los 1.000 días que ya tiene aplicación efectiva porque en nuestro país y en la CABA siempre ha habido programas para proteger y acompañar a las personas que deciden continuar su gestación durante el embarazo y los primeros meses”, dijo la socióloga y militante feminista.
El pasado 5 de abril, la exdiputada y actual presidenta del Consejo Social porteño, Cynthia Hotton, anunció a través de sus redes sociales un acuerdo que “articula al Consejo Social con la Red Nacional de Embarazo Vulnerable, y propone la promoción, en hospitales públicos de la Ciudad, de la línea telefónica de contención 0800Vida desde donde se realizan tareas de acompañamiento emocional y personalizado para aquellas mujeres que transiten un embarazo vulnerable.
A las 17 horas, en Perú 160, comenzó el acto en la esquina de la Legislatura bajo el lema “¡Basta de injerencia eclesiástica en las políticas públicas!” e “Implementación efectiva de la Ley IVE”.
Allí se convocaron organizaciones políticas y sociales como el MST Frente de Izquierda, Pan y Rosas, Las Rojas, Isadora- Mujeres en Lucha Izquierda Socialista, PdT Plenario de Trabajadoras, Partido Obrero, Liga Socialista Revolucionaria y organizaciones como las Socorristas en Red La Revuelta, entre otras.
También estuvieron presentes legisladoras y legisladores: Alejandrina Barri, Gabriel Solano, Mercedes De Mendieta y Ana María Bou Pérez.
Por su parte, la legisladora del Frente de Izquierda, Alejandrina Barri, señaló: “Repudiamos este acuerdo entre la ´antiderechos´ Cynthia Hotton y Fernán Quirós porque quieren robarse la palabra vida. Pero somo nosotras las que hemos peleado por evitar que miles de mujeres mueran en abortos clandestinos, por la salud de las niñas, de las adolescentes. Este acuerdo implica la interferencia abierta de los antiderechos, de las organizaciones religiosas, confesionales en la salud pública y no lo vamos a permitir”.
A su turno, Gabriel Solano, legislador del Partido Obrero, destacó: “En esta acción está presente el pañuelo verde y el naranja porque lo que estamos pidiendo es la separación de la iglesia y del Estado”.
En tanto, la legisladora de Juntos por el Cambio, Ana María Bou quiso llevar tranquilidad al conjunto de militantes allí reunidas. La parlamentaria mencionó que no había ningún convenio firmado y que se está trabajando para rectificar el 0800 Vida. El Gobierno de la ciudad tiene que hacerse cargo de la salud pública por lo que nosotros vamos a seguir con nuestros programas de mujeres y ninguna otra ONG va a realizar este trabajo”.
Por su parte Liliana Furió, activista del Colectivo de Cineastas y del Movimiento Feminista de Tango, dijo a Télam que “vinimos a repudiar este convenio que es un intento tramposo porque te meten este 0800 para intentar captar y disciplinar a las mujeres que están necesitando hacerse un aborto y, de esta manera empezar a colar la obstaculización hacia los derechos que nos costaron tantísimos años de lucha”.
