Se realizará el 26 de octubre y los fondos que se obtengan se destinarán a la construcción del Paseo del Bajo.
La Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE, la ex Onabe) acaba de poner en la venta un conjunto de terrenos a partir de los cuales el Gobierno espera recaudar al menos US$S 165 millones. Las subastas comenzarán el 26 de octubre próximo en la sala Néstor Kirchner de la sede de la AABE y terminarán en diciembre de este año.
Esa suma será utilizada para financiar aproximadamente el 25% de los gastos que insumirá la construcción del Paseo del Bajo, la obra de infraestructura más importante que se desarrollará en la Ciudad de Buenos Aires en los próximos años. Otro 25% provendrá de la subasta de más terrenos en 2018. Y la otra mitad se afrontará con un crédito del Banco de Desarrollo de América latina (la ex Corporación Andina de Fomento, CAF).
El lote que salió a la venta es un terreno ferroportuario subutilizado, en la zona de Retiro contigua al puerto. Tiene 91.337 metros cuadrados (mM2) y está delimitado por las avenidas Eduardo Madero y Antártida Argentina y las calles Cecilia Grierson y San Martín, siguiendo el recorrido de las vías del viejo ferrocarril portuario entre el cruce de la avenida Córdoba y el final de Madero). Es parte del proyecto denominado Catalinas Norte II, que tiene un total de siete parcelas para ser urbanizadas, de las cuales cuatro saldrán a la venta en esta etapa.
La AABE apuesta a que los terrenos se usen para la construcción de una nueva generación de oficinas y departamentos con bajo criterios de urbanismo sustentable en un lapso relativamente corto.
El Paseo del Bajo modificará el perfil de la avenida Madero, dado que el tránsito de carga pasará por otro nivel. En diciembre del año pasado, la Legislatura porteña aprobó la rezonificación de estos terrenos ferroviarios para destinarlos a proyectos integrales de urbanización e inmobiliarios, cuyas rentas generadas servirán al financiamiento del Paseo del Bajo.
Ese emprendimiento es un proyecto a cargo del Ministerio de Desarrollo Urbano y Transporte, ejecutado por la empresa estatal AUSA (la dueña de las autopistas porteñas) y la Corporación Puerto Madero, que conectará las autopistas Buenos Aires-La Plata e Illia y debería estar terminado en 2019. Se trata de una vía de 7,1 kilómetros que incluirá una autopista y carriles rápidos, con más cruces peatonales, para solucionar el problema de tránsito.
El camino se extenderá desde la Autopista Buenos Aires-La Plata sobre las avenidas Alicia Moreau de Justo y el eje Huergo-Madero, y luego por las avenidas Ramos Mejía, Antártida Argentina y Castillo hasta su empalme en el norte con la autopista Illia. Tendrá 12 carriles, de los cuales cuatro serán exclusivos para camiones y ómnibus de larga distancia, que tendrán acceso directo a la terminal de Retiro. Los ocho restantes serán de uso exclusivo para autos y colectivos de corta distancia (cuatro en sentido Norte y cuatro en sentido Sur).