Ciudad

Tres balotajes en el lomo

El jefe de Gobierno porteño y candidato de Cambiemos, ha atravesado tres instancias de balotaje a lo largo de su carrera. Lee nuestro análisis.

Por redacción La Noticia Web Ciudad

El juego de las diferencias. Mucho se ha escrito respecto de las similitudes o diferencias entre los candidatos, Mauricio Macri y Daniel Scioli. El marketing y los discursos confeccionados al oído del votante ha sido una constante en esta campaña.

Sin embargo, el escenario de balotaje, abre la posibilidad de marcar una diferencia entre los líderes del espacio más votados (FPV, Cambiemos): sus experiencias en segundas vueltas.

Datos insoslayables: Daniel Scioli jamás ha atravesado la situación de balotaje. En cambio, Macri sí, de hecho este será su cuarto y más importante.

En 2003, Mauricio Macri cuyo espacio que lideraba se llamaba Compromiso para el Cambio, se impuso sobre Aníbal Ibarra de Fuerza Porteña por 37,55% contra 33,54%. Sin embargo en la segunda vuelta, Ibarra se impuso con casi el 54% de los votos.

Distinto fue el caso de 2007, (Cromañon mediante) cuando uno de los principales jefes de campaña de Daniel Scioli, Jorge Telerman era jefe de Gobierno. Allí el progresismo llegó dividido. Daniel Filmus fue el candidato del Frente para la Victoria, mientras que el mismo Jorge Telerman era el candidato de Corriente Porteña.

Sin embargo, Mauricio Macri se impuso con Propuesta Republicana sobre Daniel Filmus en la segunda vuelta por 60,96% a 39,04%.

La tercera situación de balotaje que debió atravesar Mauricio Macri en su periplo político, fue la del 2011, tras desistir de la candidatura a la presidencia de la nación bajo el asesoramiento de su gurú político, Jaime Durán Barba.

En esa instancia, Macri volvió a imponerse por sobre el candidato del Frente para la Victoria, Daniel Filmus por 64,27% a 35,73%, sellando incluso, el periplo de Filmus dentro de la política porteña.

Tal vez estos datos, sean apenas eso: datos de color. Quizá, no tengan ninguna importancia de cara al balotaje del 22 de noviembre. Probablemente, estos datos no pesen en las cabezas de los votantes a la hora de elegir; sin embargo, lo números están y forman parte de la historia.