Vecinos denuncian que el foco de contagio está en el fondo de una casa abandonada. El ministro de Salud, Jorge Lemus, confirmó 10 mil casos en todo el país.
El avance del dengue preocupa en todo el territorio nacional y ya afecta en gran medida a los centros urbanos. Diez días atrás se supo que en una misma cuadra, en el barrio de Vicente López, ocho vecinos habían contraído la enfermedad. Ahora, un caso similar afecta al barrio de Floresta.
De acuerdo al testimonio de los vecinos, sobre la calle Marcos Paz al 1900 unas siete personas padecen los síntomas del dengue, que se caracteriza por dar fiebre alta, dolor de cabeza y musculares, erupciones, y en algunos casos náuseas, vómitos y pérdida del apetito.
Al parecer, el foco de contagio, aseguran los habitantes de esa cuadra, sería una vivienda abandonada que tiene en el fondo pastizales de un metro de altura y todo tipo de basura, entre la que se puede hallar recipientes con agua estancada que propician la reproducción del mosquitoAedes Aegypti.
De acuerdo a la información publicada hoy por el diario Popular, el gobierno de la Ciudad no respondió al reclamo: “En la municipalidad nos dijeron que no podían entrar allí a fumigar y que podrían tardar hasta un mes hasta localizar al dueño de la casa abandonada”.
“Me contagié el dengue el jueves de la semana pasada, y la verdad es que es bastante complicado, molesto, y te prohíbe hacer cualquier tipo de actividad, porque no podés estar en otro lugar que no sea la cama”, dijo un vecino al matutino.
Una mujer de esa misma cuadra relató que su hijo contrajo también dengue y que se encuentra en el hospital. “Empezó el jueves con mucha fiebre. Llamamos al médico acá en casa y primero dijeron que podía ser una gripe. Pero el viernes ya empezó con vómitos y mucha fiebre”, dijo preocupada la vecina de Floresta.
Quienes viven en esa cuadra afirman que sobrevuelan nbes de mosquitos, y que a pesar de las denuncias nadie se acercó a fumigar. Desde el instituto de Zoonosis porteño aseguraron que el primer caso fue autóctono, y en poco tiempo más personas de la cuadra se empezaron a contagiar.
El ministro de Salud, Jorge Lemus, admitió ayer que hay unos 10 mil casos confirmados de dengue en el país y advirtió que “comenzó la etapa en que la epidemia va a hacer su ápice”, por lo que coincidió con sus colegas provinciales en destacar que el descacharrado es una de las acciones principales para evitar la propagación.
La última actualización del Boletín de Vigilancia del ministerio de Salud había informado que en las primeras 8 semanas del año “se notificaron 19.451 casos de dengue incluyendo sospechosos,
probables, confirmados y descartados” y manifestó que “se descartaron 3.900 casos y permanecen en estudio 6.064”.
“Estamos comenzando la etapa en que la epidemia va a hacer su ápice”, advirtió el funcionario y destacó la importancia de que “la comunidad no solo esté informada, sino que pase a la acción” ante el pico de la epidemia, que se espera para entre marzo y abril.
Lemus afirmó que “la carga de enfermedad tan importante de los países vecinos más las condiciones ambientales nos llevaron a tener un aumento de número de casos que probablemente se acerque a la epidemia de 2009“, cuando se registraron casi 28 mil casos en el país y 5 decesos.