Ciudad

El interbloque ECO en su laberinto

Lousteau supo captar votantes; a partir del 10 de diciembre, la segunda minoría en la Legislatura será el interbloque ECO, sin embargo carecen de una conducción política única.

Por Pablo Varela

Las elecciones generales y el balotaje de la Ciudad de Buenos Aires, dejó posicionado al Frente ECO, como la segunda minoría dentro de la Ciudad.

El desafío más importante de dicha fuerza, conducida al menos en términos electorales por el economista Lousteau,  es poder coordinar una agenda parlamentaria conjunta, y una posición común de cara a los principales temas y debates de la Ciudad.

Sin embargo, a pocos meses de la elección, el diputado de SUMA+, no toma las riendas y la conducción ECO se encuentra acéfala.

El interbloque funcionaría más por afinidad de sus miembros, que por una sólida conducción política.

En charla con LNW Ciudad, el legislador de la UCR Hernán Rossi contó detalles del funcionamiento: “cuando tenemos que consensuar, nos juntamos”; al mismo tiempo que se expresó respecto de la posibilidad de consagrar un presidente de bloque “no con esta legislatura; a partir de diciembre veremos si es necesario”. Cabe destacar, que hoy el interbloque de ECO cuenta con nueve legisladores, y a partir de diciembre tendrá catorce.

Hace escasos días, Rossi declaró ante un medio colega: “funcionamos muy bien sin jefe”.

Sólo se sabe de una gran reunión que tuvo ECO en un bar en San Telmo, hace algunas semanas atrás. Lousteau convocó tanto a los legisladores actuales, como a los futuros legisladores y comuneros que asumirán a partir de diciembre. Algunos de los asistentes admitieron que conocerse ahí mismo.

“Tratamos de juntarnos todos los miércoles”, sostuvo Rossi , “después que está definido el temario de la sesión” aunque no aclaró si Lousteau y Fernando Sánchez participan de dichas charlas.

Por su parte, el diputado del Partido Socialista Auténtico Adrián Camps, reconoció que la única reunión que tuvo Lousteau fue en el mencionado bar de San Telmo; allí “propuse hacer una mesa política que la coordine Lousteau” dijo y aclaró que su propuesta fue aceptada pero que no tuvo efectos en la práctica.

De todos modos, Camps dejó en claro: “nos reunimos con cierta periodicidad por agenda parlamentaria” y destacó que cumplieron con uno de sus primeros e importantes propósitos: “acordamos hacer una presentación conjunta en relación a los órganos de control”.

Mucha voluntad; poca organicidad

Maximiliano Ferraro de la Coalición Cívica en cambio dejó en claro su posición desde el inicio: “somos distintos bloques” y agregó que hay “una coordinación entre los presidentes” de cada uno de los espacios. El actual legislador, fue el 2° candidato en la lista de legisladores de ECO, detrás de Roy Cortina y su jefa Elisa Carrió fue una de las principales impulsoras de la candidatura del ex ministro de economía.

Sin embargo, Ferraro restó a importancia al rol del economista: “no son solamente nombres propios, es la construcción de distintos partidos políticos” aunque admitió que “no desconoce la capacidad y los méritos de cada uno de nuestros candidatos”.

En relación a la futura legislatura, Rossi desestimó posibles roces entre dos pesos pesados como Graciela Ocaña y Roy Cortina a partir de diciembre: “justamente, como son dos figuras de peso no va a haber inconvenientes” sostuvo y agregó que Cortina “va a jerarquizar a la Legislatura y al bloque” de ECO.

Por su parte Camps dijo en relación a Graciela Ocaña: “tengo trato cordial; es un poco más distante”; está claro que la “Hormiguita” tiene un perfil más nacional, está cercana a Rodríguez Larreta, y hasta suena para un posible ministerio en caso de Macri acceda a la presidencia.

Hoy ECO es un interbloque que funciona correctamente en la Legislatura, más por propia buena voluntad de sus miembros, que por organicidad y conducción política.